El contexto histórico-político-económico-cultural enmarca todas las formas de ser del hombre. Ser sujetos emprendedores en la era de la globalización requiere no sólo formación sino más creatividad, perseverancia, astucia y más fortaleza aún que en épocas anteriores. Y agrego un factor, que entiendo tampoco deberíamos dejar de lado, un factor que quiero resaltar, el humano.
Hoy día una formación profesional no asegura un buen pasar económico, ni mucho menos permite soñar con un futuro prometedor. La época de "M'Hijo el Dotor" quedó atrás con nuestros abuelos, un profesional o empresario debe tener en cuenta las estrategias del mercado para ser parte de él.
En este capitalismo tardío por el que estamos atravesando, hasta las personas somos objetos de consumo. El mercado marca las tendencias: predominio de la imagen en un amplio significado, la velocidad, información al instante, todo a un sólo click. Los últimos avances tecnológicos están a nuestro alcance. Podríamos ejemplificar reformulando el viejo dicho: "Dime qué celular usas y te diré quién eres". Por supuesto, no podemos vivir fuera del sistema pero podemos no dejarnos avasallar y elegir cómo ser parte.
Como profesionales, y como personas, necesitamos rescatar esa formación en valores que nos han transmitido nuestros abuelos, rescatar el factor humano en nuestros negocios y empresas. Tratamos con personas, no con objetos, trabajamos para personas, trabajamos con personas y son personas las que trabajan para nosotros. Y como personas, sujetos de derechos y obligaciones, nuestra palabra debería tener el mismo valor que cualquier documentación que firmemos.
En éste lugar me posiciono y desde éste lugar ofrezco mis servicios web en CrearSitioWeb.com desde el año 2005. Y me es grato afirmar que desde este lugar establezco relaciones laborales con clientes de los más variados rubros de toda nuestra Argentina. ¿Qué quiero decir con ésto? Que se puede, que para ser parte del sistema no es necesario pasar por encima de los demás al estilo de "sálvese quien pueda".
Volviendo a las nuevas tecnologías, nadie hoy día puede tener duda de que Internet es la nueva tendencia del mercado, es una de sus aristas más importantes, la cual tiene sus propias reglas y a cada minuto se supera a sí misma. Sólo tenemos que observar cómo los demás medios de comunicación la sostienen. No podemos pensar en expandir nuestro negocio, ni en aumentar la cartera de clientes, sin considerar tener una página web y prácticamente, no tiene sentido tener una página web si no está posicionada en los buscadores, a menos que sólo quiera usarla como tarjeta de presentación.
Cuando un potencial cliente me contacta para tener su primer página web o para renovar la que ya tiene, trato de comprender la envergadura de su proyecto o su negocio, para poder lograr un diseño que realmente represente sus intereses. Me gusta confiar en los proyectos de la gente, me gusta confiar en la gente, creo que todos merecemos eso en primer lugar.
Si trabajamos juntos hago mío su proyecto, lo asesoro, le informo sobre todas sus posibilidades y el alcance real del mismo. Porque el éxito en el emprendimiento del cliente también es mi éxito. Cumplo en tiempo y forma lo pactado, no tomo trabajos que sé que no voy a poder entregarlos a tiempo y soy absolutamente sincera al respecto. Dependiendo de las posibilidades del cliente financio los pagos, los cuales se van realizando en la medida que entrego los avances del diseño.
Para mí es un orgullo decir que hay clientes con los cuales trabajo hace 7 años, sostengo excelentes relaciones laborales con muy buenas personas, como también tuve que lidiar con gente sin código por decirlo de alguna manera. Pero es importante aclarar que fueron un porcentaje mínimo. No me voy a extender sobre este tema porque justamente lo que quiero destacar es lo contrario.
Como profesionales, y como personas, podemos ser parte del sistema, participar activamente en este mundo globalizado a través de Internet, utilizar estratégicamente sus más variadas herramientas, aprovechar sus beneficios sin perder de vista lo que esencialmente somos: sujetos, y no objetos.
Humildemente, espero no haber dado respuestas sino haber generado preguntas y cuestionamientos porque de ese modo, seguramente, podremos lograr esas diferencias de opiniones que tanto nos enriquecen a todos.
Silvia Sanguina
Buenos Aires - AR
CREAR SITIO WEB